VENEZUELA - La conformación del comando de campaña del presidente Chávez

A escasos dos meses de la oficialización de la campaña de elección presidencial, por el Consejo Nacional Electoral (CNE) se crea el Comando de Campaña denominado “Batalla de Carabobo”, presidido por el Alcalde del Municipio Libertador en la Ciudad de Caracas, Jorge Rodríguez, conformado por el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), los partidos que conforman el Polo Patriótico (PCV, MEP, UBV, entre otros) y el Gran Polo Patriótico (GPP), que abarca partidos regionales, movimientos sociales, organización de mujeres, entre variadas estructuras campesinas, pescadores, conformando un gran movimiento de pueblo organizado, por la reelección del presidente de Venezuela Hugo Chávez.

En el marco de esta nueva batalla electoral, se comenzaron a conformar los comandos de campaña en las distintas regiones, siendo en el oriental Estado Sucre y la Ciudad de Cumana, capital del mismo, donde se juramentó el primer equipo regional, designando al gobernador Enrique Maestre como Jefe de Campaña, en un gran acto donde participaron el Presidente de campaña Jorge Rodríguez, la vicepresidente del PSUV Yelitza Santaella, el Alcalde del Municipio Sucre, Rafael Acuña y varios alcaldes que conformaran los equipos en cada Municipio.

Las constantes movilizaciones en apoyo a la salud del presidente Chávez en el mes de marzo, fueron marcando una importante y activa reactivación de los sectores del chavismo, así como las nuevas fuerzas políticas y sociales agrupadas en el GPP, que llenaron los multitudinarios actos en la capital del país, Caracas y en varias ciudades del interior. Demostrando de esa manera el apoyo al candidato de la revolución bolivariana, pese a la campaña de la oposición sobre su enfermedad y sus tratamientos semanales de radio terapia en Cuba, intentando crear una matriz de opinión sobre que un mandatario no quiere atenderse en el país y la precariedad de su salud en su candidatura el 7 de octubre del 2012.

Encuestas reflejan que Chávez aventaja en un 21% al opositor Capriles

Datos suministrados por varias encuestadoras, confirman que el candidato de la Revolución Bolivariana Chávez aventaja por 21% al candidato presidencial de la derecha elegido en las controvertidas primarias, de la denominada Mesa de Unidad Democrática (MUD), Henrique Capriles Radonski. De acuerdo al último sondeo de opinión realizado por la encuestadora North American Opinión Research (NAOR) realizado entre el 26 de marzo y el 4 de abril de 2012, se indica que un 58% de la población votaría por Chávez y 37% por Henrique Capriles Radonski. El estudio refiere además que un 85% de los venezolanos está de acuerdo con una nueva Ley del Trabajo que incluya el regreso de la retroactividad de las prestaciones sociales. Solamente 12% está en desacuerdo.

Consultados sobre si están de acuerdo con que Petróleos de Venezuela (PDVSA) se involucre en la política económica y social del país, un 77% manifestó que sí, frente a un 21% que dijo no. El informe también refiere que 81% de los consultados cree que en Venezuela se vive en democracia, mientras 14% considera lo contrario.

Sobre el apoyo hacia los partidos políticos, el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) ocupa el primer lugar con 56%. Mientras que en la MUD, Primero Justicia (Grupo de Capriles) obtuvo 19%, mientras que COPEI, Acción Democrática (partidos que gobernaron Venezuela por más de 40 años), Proyecto Venezuela y Un Nuevo Tiempo suman entre todos apenas 15% de apoyo.

Este estudio de opinión pública fue realizado a través de 2.000 entrevistas en hogares con estratos socioeconómicos A, B, C, D y E en los estados Anzoátegui, Aragua, Bolívar, Carabobo, Lara, Mérida, Miranda, Monagas, Nueva Esparta, Portuguesa, Sucre, Táchira, Vargas, Zulia y Distrito Capital. El margen de error fue de 2,75%.

Unidad latinoamericana enfrenta la oposición de EEUU y Canadá en la Cumbre

La nueva Cumbre realizada en Colombia, volvió a ratificar que América Latina sigue consolidando mecanismos de integración y Defensa en el Continente. El apoyo a Cuba y a Argentina en el tema de Las Malvinas fueron un reclamo generalizado, sólo las voces de EEUU y Canadá mostraron su desacuerdo no permitiendo el consenso, para la declaración final de este evento, marcando con esta posición la misma actitud antidemocrática tanto en la OEA, como en sus vetos en la ONU. La actitud del presidente Barack Obama difirió totalmente de la Cumbre anterior, mostrando molestia e indiferencia ante los discursos y los reclamos de los mandatarios latinoamericanos, que con diferentes posturas políticas e ideológicas han avanzado, en la construcción de sistemas de integración, como el ALBA, UNASUR y el grupo CELAC creado en diciembre del 2011 que reunió a todos los países latinoamericanos y Caribeños, realidad que deja a la OEA como un mecanismo del pasado, que se contrapone a la nueva realidad continental.

El apoyo de EEUU y Canadá a Inglaterra en Las Malvinas, así como el criminal bloqueo económico a Cuba, y más de siglo y medio de intervenciones de EEUU en Latinoamérica, ya sea a través de invasiones (México, Cuba, Centroamérica, Republica Dominicana, Panamá, entre otras) o golpes de estado, han marcado el carácter colonialista e imperialista de los gobiernos estadounidenses, bajo el viejo adagio de “divides y vencerás”.

Hoy se encuentran en esta Cumbre con países mas conscientes de la unidad y sus capacidades económicas, que ven el dialogo como salida a los conflictos, habiendo logrado frenar desde políticas desestabilizadoras, hasta las propuestas de los Tratados de Libre Comercio (TLC), que han sido desestimados por la mayoría de los países de estas áreas, conscientes de su fracaso en México, también los modelos del Fondo Monetario Internacional (FMI), que no solo fracasaron en América Latina, sino que han llevado a Europa a límites insospechados, con millones de desocupados, altísimos niveles de inflación, deudas impagables, todo con el objetivo de que los bancos y las empresas financieras de EEUU y Europa sean financiadas por los pueblos y no por los banqueros, los especuladores y la empresas armamentistas.

De esta manera no habrá otra Cumbre sin Cuba, así lo manifestaron la mayoría de los mandatarios presentes, tampoco se dejara de apoyar a Argentina en su reclamación de Las Malvinas. Ahora será más difícil lograr consensos para agresiones a otras naciones hermanas de esta América, como históricamente se hizo durante más de 50 años de la nefasta OEA al servicio de EEUU. Pero tampoco se puede caer en la ingenuidad de pensar que el imperialismo estadounidense cejará en obtener el control de los recursos de estas naciones, ya que lo viene haciendo en sus campañas contra Venezuela, Bolivia, Argentina, y lo sigue haciendo en Medio Oriente, con sus guerras y conspiraciones. Sólo la unidad económica y política de nuestros pueblos podrá hacer frente a los intereses trasnacionales e imperiales.

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